RECORDAMOS:
Ya sabemos que nació en Fuendetodos, Zaragoza (1746). Luego se trasladó a Madrid (con 17 años), donde siguió aprendiendo pintura con su profesor Francisco Bayeu. Después se casó con la hermana de éste, Josefa.
Con 23 viajó a Italia donde copió a los clásicos anotándolo todo en su cuaderno.
Después regresa a Madrid donde comienza su carrera como pintor de cartones para tapices para la Real Fábrica de Tapices de Santa Bárbara. En aquella época reinaba Carlos IV. Los tapices los utilizaban para decorar los palacios y sus dependencias.
Hoy vamos a ver dos TAPICES muy conocidos de Goya: EL PELELE y la LA GALLINITA CIEGA
EL PELELE: En este tapiz se muestra una escena popular. Cuatro jóvenes vestidas de majas mantean a un pelele (muñeco), y riéndose.
Se trata de un rito en las despedidas de soltería. Simboliza el poder de la mujer sobre el hombre. Los colores que utiliza Goya son luminosos.
Es uno de los cartones para tapices sobre diversiones campestres. De este cartón se conserva un boceto en el Museo del Prado.
El cuadro muestra muchachos y muchachas jugando al popular pasatiempo de «la gallina ciega», con un personaje vendado en el centro que intenta tentar a los demás, que bailan en corro, con una gran cuchara.
Es muy importante que estos juegos populares tan divertidos no caigan en el olvido.
JUEGO: LA GALLINITA CIEGA. POPULAR.
La gallinita ciega es un juego sencillo y muy divertido. Este juego ayuda a los niños a comprender la importancia de los sentidos, ya que se juega con los ojos vendados.
1. En primer lugar se debe elegir a quien llevará la venda, es decir, el que hará el papel de gallinita ciega y deberá encontrar al resto. Una vez elegido debe ponerse un pañuelo en los ojos, deforma que no pueda ver nada.
2. El resto de los niños se ponen en círculo alrededor de la gallinita ciega, cogidos de las manos. La "gallinita" debe dar tres vueltas sobre sí misma antes de empezar a buscar, para que no sepa dónde está.
3. La tarea de la gallinita consiste en atrapar a alguno de los niños, que pueden moverse pero sin soltarse de las manos. Cuando la gallinita tenga a un niño, tiene que adivinar quien es mediante el tacto. Si acierta, se intercambian los papeles.
Para jugar a este juego, se puede comenzar recitando este verso popular infantil: Gallinita, gallinita, ¿qué se te ha perdido en el pajar? Una aguja y un dedal... Da tres vueltas y la encontrarás.
¡Vamos con nuestra tarea individual!
¡BESITOS!
No hay que olvidar los juegos populares y tradicionales,son parte de nuestra cultura.
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